Aparte de la extensa red de comunicación nerviosa que conecta al corazón con el cerebro y con el resto de cuerpo, el corazón transmite información al cerebro y al cuerpo, generando el más poderoso y más extenso campo eléctrico del cuerpo.
Se ha demostrado que el ritmo del cerebro se sincroniza con la actividad rítmica del corazón, y que durante la manifestación de sentimientos como el amor o el aprecio, la presión de la sangre y el ritmo respiratorio, se embarcan juntos con el ritmo cardíaco.
Los latidos del corazón cambian significantemente mientras experimentamos diferentes emociones. Sentimientos negativos, como la ira o la frustración, están asociados con un desordenado patrón en el ritmo cardíaco. En contraste,
sentimientos como el amor o el aprecio, están asociados con un suave, ordenado y coherente patrón en la actividad del ritmo cardíaco.
Existe evidencia de que un sutil pero influyente sistema electromagnético de comunicación “energético” opera justo debajo de nuestra conciencia.
Hay estudios que midieron el intercambio de energía cardíaca entre individuos separados hasta por metro y medio de distancia. También las ondas cerebrales de una persona pueden, de hecho, sincronizarse con el corazón de otra.
Es más, cuando un individuo está generando un ritmo cardíaco coherente, es más probable que ocurra la sincronización entre las ondas cerebrales de esa persona y los latidos del corazón de otra.
El resultado de estos experimentos ha llevado a deducir que el sistema nervioso actúa como una “antena”, la cual está orientada y responde hacia los campos electromagnéticos producidos por los corazones de otros individuos.
Incluso existe evidencia intrigante de que las interacciones del corazón pueden ocurrir entre personas y animales. La comunicación energética a través del corazón facilita el desarrollo de una expansión de nuestra conciencia en relación con nuestro mundo social.
Un conjunto reciente de trabajos de vanguardia, muestran que el campo de interacción socioemocional entre una madre y su hijo es esencial para el desarrollo cerebral, el surgimiento de la conciencia y la formación de una autoestima saludable.
Esto ocurre cuando estas interacciones están cargadas, y esto es importante, con emociones positivas (amor, alegría, felicidad, excitación, aprecio, etc.) y están dentro de los patrones de intercambios recíprocos entre estos dos individuos como algo altamente sincronizado.
Estos patrones se imprimen en la mente del niño y tendrán una influencia en su función psicosocial a lo largo de su vida.
Respirando con Actitud, es una herramienta que te ayuda a sincronizar tu corazón, mente y cuerpo para darte una coherencia psicofisiológica más poderosa.
Con esta respiración te enfocas en tu corazón y en el plexo solar mientras respiras con una actitud positiva. El corazón automáticamente armonizará la energía entre el corazón, mente y cuerpo, incrementando la conciencia y la claridad.
La Técnica de Respirar con Actitud
1. Enfócate en tu corazón mientras inhalas. Mientras exhalas enfócate en el plexo solar. El plexo solar se encuentra a 10 cm. debajo del corazón, justo debajo del esternón donde los lados derecho e izquierdo de la caja torácica se juntan.
2. Practica inhalar a través del corazón y exhalar a través de la caja torácica durante 30 segundos o más para ayudar a anclar tu atención y tu energía ahí. Después escoge alguna actitud o pensamiento positivo para inhalar o exhalar durante esos 30 segundos o más. Por ejemplo, puedes inhalar una actitud de aprecio y exhalar una de atención.
3. Selecciona actitudes que te ayuden a compensar las emociones negativas y de desequilibrio de las situaciones por las que estas atravesando. Respira profundamente con la intención de dirigirte hacia el sentimiento de esa actitud. Por ejemplo, puedes inhalar una actitud de balance y exhalar una actitud de misericordia, o puedes inhalar una actitud de amor y exhalar una actitud de compasión.
Practica diferentes combinaciones de actitudes que quieras desarrollar. Puedes decir en voz alta Respiro Sinceridad, Respiro Coraje, Respiro Tranquilidad, Respiro Gratitud o cualquier actitud o sentimiento que quieres o necesites.
Incluso si no sientes el cambio de actitud al principio, haciendo un esfuerzo genuino para cambiar, al menos te ayudará a alcanzar un estado neutral. En el cual, tendrás más objetividad y ahorrarás energía.
Los efectos de la coherencia psicofisiológica incluyen un incremento en la sincronización entre las brechas en dos sistemas nerviosos autónomos, un incremento en la sincronización entre el corazón y cerebro, un incremento en la resonancia vascular, y un entendimiento entre diversos sistemas oscilatorios fisiológicos.
ww.heartmath.org
http://saikuhayotravidaposible.blogspot.com.ar/2014/11/el-cerebro-del-corazon.html
No hay comentarios.:
Publicar un comentario