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Apuesto a que ya te lo veías venir. Y sí, hay una razón por la que vives escuchando que "tienes que hacer ejercicio". En este sentido, estudios recientes han demostrado que quienes le dedican al menos 30 minutos diarios a la actividad física escapan de las enfermedades. Además, el ejercicio previene la aparición de problemas como el cáncer, enfermedades cardíacas, diabetes, demencia y depresión.
#2 Frutas y verduras
Las frutas y verduras son las mejores fuentes de vitaminas y minerales. Además, aportan los antioxidantes necesarios para fortalecer las defensas y alejar las enfermedades. Por tanto, haz tu mejor esfuerzo por disfrutarlas en toda su variedad.
El otro secreto para que puedas mantenerte en perfecto estado de salud es
adoptar una actitud positiva hacia tu vida, tu entorno y las diferentes situaciones que atraviesas día a día. Diversas investigaciones han develado que las personas positivas se enferman menos y tienen menos riesgos de desarrollar enfermedades respiratorias. Además, quienes carecen de esta actitud son más vulnerables al estrés y las tensiones.
No subestimes la relevancia de lavarte bien las manos. Esta es una de las maneras más sencillas para conservar la salud. Por tanto, procura limpiarlas bien con jabón y agua tibia. Esto reducirá tus posibilidades de resfriarte. Báñate todos los días y limpia bien cada parte de tu cuerpo. Asegúrate de que no se acumule suciedad en tus uñas.
#9 Hidratación
El 60% del organismo humano está constituido por agua, por lo que no es nada disparatado el hecho de que necesitemos estar bien hidratados para prevenir la aparición de enfermedades. El agua, así como las frutas y verduras abundantes en ella, son imprescindibles para la buena asimilación de los nutrientes esenciales y la eliminación de toxinas.
#10 Dieta balanceada
Asegúrate de que tu dieta sea rica en vitamina A, vitamina C, proteínas, carbohidratos saludables, hierro y ácidos grasos. Por otro lado, investigaciones recientes han revelado que alimentos como las cebollas, el ajo, el jengibre y la miel tienen previenen la acción de virus y bacterias.
Descubre las bondades de estos secretos. Pronto, tú también serás de esas personas que nunca enferman.
Las frutas y verduras son las mejores fuentes de vitaminas y minerales. Además, aportan los antioxidantes necesarios para fortalecer las defensas y alejar las enfermedades. Por tanto, haz tu mejor esfuerzo por disfrutarlas en toda su variedad.
#3 Actitud positiva
El otro secreto para que puedas mantenerte en perfecto estado de salud es
adoptar una actitud positiva hacia tu vida, tu entorno y las diferentes situaciones que atraviesas día a día. Diversas investigaciones han develado que las personas positivas se enferman menos y tienen menos riesgos de desarrollar enfermedades respiratorias. Además, quienes carecen de esta actitud son más vulnerables al estrés y las tensiones.
#4 Hábitos sanitarios
No subestimes la relevancia de lavarte bien las manos. Esta es una de las maneras más sencillas para conservar la salud. Por tanto, procura limpiarlas bien con jabón y agua tibia. Esto reducirá tus posibilidades de resfriarte. Báñate todos los días y limpia bien cada parte de tu cuerpo. Asegúrate de que no se acumule suciedad en tus uñas.
#5 Vida social
Diversas investigaciones científicas han revelado que las personas con una vida social activa cuentan con un sistema inmune más fuerte y tienen menos riesgos de sufrir enfermedades infecciosas. Asimismo, se sabe que previene la pérdida de memoria y otros problemas cognitivos.
Diversas investigaciones científicas han revelado que las personas con una vida social activa cuentan con un sistema inmune más fuerte y tienen menos riesgos de sufrir enfermedades infecciosas. Asimismo, se sabe que previene la pérdida de memoria y otros problemas cognitivos.
#6 Nivel de pH
Una buena salud equivale necesariamente a un nivel de pH equilibrado, es decir, ni muy ácido, ni muy alcalino. Para que esto suceda, asegúrate de consumir vegetales de hojas verdes, espárragos, zanahorias, pepinos y paltas. Al mismo tiempo, trata de reducir el consumo de comidas procesadas lo máximo posible.
Una buena salud equivale necesariamente a un nivel de pH equilibrado, es decir, ni muy ácido, ni muy alcalino. Para que esto suceda, asegúrate de consumir vegetales de hojas verdes, espárragos, zanahorias, pepinos y paltas. Al mismo tiempo, trata de reducir el consumo de comidas procesadas lo máximo posible.
#7 Estrés
Un estudio realizado por la Universidad de Duke demostró que el estrés debilita el sistema inmuney aumenta los riesgos de padecer enfermedades cardíacas. Por otro lado, se sabe que incrementa las posibilidades de contraer infecciones bacterianas, como la tuberculosis. Así que siempre que te sientas tenso o estresado, prueba salir a caminar. Esta medida te ayudará a sentirte más relajado.
Un estudio realizado por la Universidad de Duke demostró que el estrés debilita el sistema inmuney aumenta los riesgos de padecer enfermedades cardíacas. Por otro lado, se sabe que incrementa las posibilidades de contraer infecciones bacterianas, como la tuberculosis. Así que siempre que te sientas tenso o estresado, prueba salir a caminar. Esta medida te ayudará a sentirte más relajado.
#8 Descanso
La ausencia de sueño puede tener un efecto degenerativo tanto sobre la salud física, como mental. Y es que, estar descansado te permite afrontar los desafíos diarios con una mejor actitud, ayuda a mantener equilibrados la presión arterial y los niveles de colesterol en sangre, y previene la depresión.
La ausencia de sueño puede tener un efecto degenerativo tanto sobre la salud física, como mental. Y es que, estar descansado te permite afrontar los desafíos diarios con una mejor actitud, ayuda a mantener equilibrados la presión arterial y los niveles de colesterol en sangre, y previene la depresión.
#9 Hidratación
El 60% del organismo humano está constituido por agua, por lo que no es nada disparatado el hecho de que necesitemos estar bien hidratados para prevenir la aparición de enfermedades. El agua, así como las frutas y verduras abundantes en ella, son imprescindibles para la buena asimilación de los nutrientes esenciales y la eliminación de toxinas.
Asegúrate de que tu dieta sea rica en vitamina A, vitamina C, proteínas, carbohidratos saludables, hierro y ácidos grasos. Por otro lado, investigaciones recientes han revelado que alimentos como las cebollas, el ajo, el jengibre y la miel tienen previenen la acción de virus y bacterias.
Descubre las bondades de estos secretos. Pronto, tú también serás de esas personas que nunca enferman.
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