¿Quién soy yo? es una pregunta o un Mantra que nos sitúa en el presente, en el momento, que nos mueve energías internas como los pensamientos y emociones, nos cuestiona nuestra realidad.
Somos lo que sentimos, lo que pensamos, lo que hacemos; eso es lo que creemos que es nuestra realidad, como si una persona diferente a nosotros habitase en nuestro cuerpo. Nuestra realidad no es más que una mera ilusión, vivimos en el pasado o en el futuro pero no en el presente, vivimos desde el inconsciente con nuestras posibilidades y limitaciones, las cuales heredamos de nuestras familias y por fidelidad se las trasmitimos a nuestros hijos y así sucesivamente como acto inconsciente.
En el universo hay diferentes leyes por las cuales somos tratados, según los científicos la física ha ido evolucionando y desarrollándose en las últimas décadas; sin embargo ella siempre ha estado en el mismo lugar y
nosotros con ella, por lo tanto respondemos diariamente con ella en un estado mecánico o relativo según el momento del día.
La física quántica hoy nos muestra una nueva perspectiva, teniendo en cuenta que somos seres vivos, las diferentes vibraciones son las que pautan la nota de nuestra materia, cada célula por estímulos tiene una diferente vibración y por lo tanto forma; todo son vibraciones, energía y dependiendo en el estado que vibremos enviaremos una energía u otra, y así los resultados en la forma, la materia.
Así pues todo es energía, en principio neutra y nosotros la polarizamos, a través de nuestros pensamientos, emociones y actos; pero cuando lo realizamos desde el inconsciente no somos dueños de nuestro destino, él es dueño de nosotros. En nuestro inconsciente se albergan todos nuestros atributos como la valentía o la vergüenza, el miedo y la cobardía, la humildad y la avaricia, etc... todas llamadas EGO, que se manifiestan a través de la personalidad y son ellas las dueñas de nuestro destino mientras somos inconscientes. Son nuestro Karma .
Creemos el Dharma en nuestro destino a través de la aceptación, de la gratitud, del amor hacia nosotros mismos, dejemos de vivir en la lucha, trabajemos la conciencia desde el corazón, aprendamos a vivir con la energía que nos pertenece, apoyémonos en nuestras debilidades y trasformémoslas en posibilidades, mejor aún en realidades.
Todos somos Budas, pero no lo sabemos; tomemos a nuestras Familias y con el Gran Espíritu y el Universo de la mano, visualicemos mas allá del horizonte para caminar todos juntos, pues el individuo no es nadie sin el resto, ya que todos somos el todo.
No olvidemos que todo lo que somos es lo que nosotros atraemos desde nuestro inconsciente, necesitamos abrirnos al campo de la realidad consciente y con amor, y sin juzgar o criticar tomemos a nuestros destinos para vivir en el Dharma.
Autor: Miguel Anxo Martínez López. Namaste
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