16 de abril de 2014

Descifrando el universo: La sociedad de la abundancia o sociedad utópica.

¿Las utopías son factibles? Si se puede imaginar ¿se puede llevar a cabo? ¿Los cambios son posibles en una sociedad como la nuestra? ¿Podemos soñar en una sociedad ideal y/o diferente basada en el amor y el respeto? ¿Julio Verne creyó que algún día existiría el submarino? Si lo soñó, lo creyó.

Las utopías dejan de ser cuando se materializan, cuando se vuelven reales. Con un cambio de conciencia colectiva, mucho trabajo duro en equipo con buenas ideas y mejores ilusiones factibles, el mundo puede cambiar. Y es que tenemos el impresionante y cierto poder de las ideas. Éstas sobreviven a una guerra, a la muerte del pensador e incluso a varias generaciones. El increíble mundo de las ideas es el que mueve los negocios, el dinero, las personas, las civilizaciones….



Imaginemos una sociedad tecnológicamente y filosóficamente avanzada, muy diferente a la humana actual, como en esas que las películas de ciencia ficción nos han mostrado en tantas ocasiones y vemos como algo irreal.

Para intentar comprender esto partiremos del individuo para llegar a la sociedad de la mano de los filósofos, como por ejemplo Hobbes, Rousseau, Platón o Nietzsche. Abrir la mente porque el viaje ¡empieza!

Un individuo, muy diferente al humano que nos cruzamos por las calles. Un individuo que, en lugar de preocuparse únicamente por su entorno personal, se ocupa además, y pone por encima, el entorno colectivo, el planeta, el cosmos… Imaginad un ser que ha comprendido que todo forma parte de un engranaje vivo, entiende que los árboles, los animales y otros reinos, el planeta, las fuerzas y el cosmos le están observando y es juzgado por sus actos y pensamientos por una avanzada ley, (causa, efecto, también conocida por ley Kármica). Para intentar comprender cómo funciona esta compleja ley, pensemos en el principio de semejanza entre el macrocosmos y

el microcosmos. El universo tiende al equilibrio, cualquier intento de desequilibrio se compensa. Una forma fácil de comprender el equilibrio es admirar la naturaleza, con sus diferentes ciclos. O pensar en los dinosaurios, eran grandes e ineficientes, llegado su fin de ciclo desaparecieron. Los supervivientes, se adaptaron a los nuevos tiempos. Podríamos llamar a este proceso, la conocida evolución. Pero no me refiero a una caótica o entrópica evolución, sino a un pautado sendero de optimización regido por conciencias cósmicas.



Ahondemos en este utópico ser: Se rige por la fuerza del amor y un espíritu de superación y/o voluntad de mejorar. Un iluminado en sánscrito. Su filosofía le acerca a la perfección y cada día ha sabido canalizar sus bajas tentaciones y deseos en el afán de conocimiento sin ánimo de lucro. Alguien altruista con una única máxima en su cabeza: dar más al mundo de lo que recibe. Citando brevemente a una película interesante de nuestros tiempos, IN TIME, este utópico pudiera ser alguien que ha comprendido que el sistema le cede un tiempo para su existencia y de él depende como lo invierta o lo pierda. Un loco que ha comprendido las reglas de este juego, a ojos de muchos podría llegar a parecer, pero él sabe en su corazón que ha logrado comprender algo que muchos ignoran. Ha comprendido que hay algo que nunca se podrá inventar, ni comprar de forma verdadera: el amor. Cabe enaltecer que no desea nada material innecesario (un hogar en equilibrio con el planeta, un medio de transporte limpio, una vestimenta, y todas las herramientas necesarias para su trabajo definiría el mínimo necesario, que a su vez no haría falta ni que fueran de su propiedad (alquiler) en aquello que llamamos austeridad, porque sabe que lo importante está en el interior, y le gusta ser, más que parecer.



A su vez, ha comprendido el diseño universal y ha desencriptado las leyes por las cuales se rige, básicamente el equilibrio (para comprender el equilibrio, recomiendo leer las enseñanzas de Buda en el que dice, para entendernos, que para estar en equilibrio debemos fluir en el entorno como si agua fuéramos). Para Nietszche, un súper hombre, para Platón un filosofo rey. Para los budistas, un Buda. Para los cristianos un Jesucristo. Para el universo, un hijo del Arquitecto cósmico completo. A estas alturas muchos pensaran que tal grado de maestría es inalcanzable. Que no hay universidad que enseñe tal conocimiento. Enfatizar que existe la llamada universidad de la vida, es gratuita y te permite recorrer este sendero, a lo largo de muchas existencias pero requiere mucho esfuerzo y perseverancia, adquirir tal maestría y poderla transmitir.

Es lo que podríamos llamar una evolución social a gran escala partiendo de un cambio filosófico de los individuos y por medio de la ley de contacto extenderse al resto y provocar así un cambio filosófico-social e iniciar un cambio de era.

Imaginar ahora, una sociedad de seres así. Personas que compiten y cooperan para un avance global teniendo en cuenta la filosofía del individuo que antes he descrito.

La filosofía que mueve esta sociedad (recomiendo leer la Republica de Platón, hacer un resumen sería una falta de respeto a un trabajo tan complejo y elaborado) es básicamente la suma de las filosofías individuales que antes he descrito. En cuando a los bajos deseos que todos ya han vencido, antes de integrarse como adultos en esta sociedad, sólo hablaré del peor de todos. La corrupción. La corrupción se vence cuando los políticos integran la filosofía de un filósofo rey de Platón y seres guardianes de la paz con la filosofía (esto sonará a ficción) Jedai de Star Wars. En dos núcleos separados pero codependientes sin interacción mutua, pues las leyes de los guardianes de la paz están escritas hace mucho tiempo y son perfectas.

Como veis, no hay justicia. Pues los Jedais obedecen a la justicia avanzada que antes he mencionado únicamente (ley kármica), y la educación ha hecho el resto. No hablaré de la filosofía Jedai, (recomiendo ver las películas Star Wars) y los políticos y su filosofía (leer a Platón) pero resumiendo, individuos que trabajan GRATIS y/o sin contraprestación económica física. Le motiva y le apasiona el trabajo y sabe que como caiga en corrupción aparecerá un guardián del equilibrio (Jedai) y servirá para alimentar al planeta y/o juzgado por la ley cósmica. Se mueve y le motiva, agradecer al universo, la energía que le ha cedido para su existencia, y a su vez saber que cuando muera, ha dejado un mundo mejor de que ha encontrado él al nacer, donde su descendencia podrá vivir en paz y harmonía con el medio que habita. Sabe que no ha de pedir nada a cambio, pues ya ha recibido el milagro de la vida.



A la hora de satisfacer las necesidades básicas de los individuos, a parte de las anteriormente habladas, la sociedad le retornará el mismo valor que sus contribuciones en alimentos, vivienda y transporte. Por último y más difícil de concebir, hablaré de la economía-social. Si hasta ahora esto es una utopía ahora lo será al cuadrado.

Un sistema económico regido por los valores y la filosofía individual donde no hay agresión al planeta a la hora de obtener materias primas (talo un árbol y planto dos, siguiendo la máxima de dar más al entorno de lo que recibo de él) y no hay especulación, ni bancos especulativos con intereses abusivos en la que recientemente se ve despuntar, la banca ética, con una ética semejante a la del individuo antes descrita o austeridad, ni tan siquiera dinero como hoy lo conocemos.

Un pequeño inciso para explicar que en esta sociedad: los integrantes, estudian, trabajan y tienen su ocio a razón de un 33% por apartado del tiempo que no están durmiendo. Lo cual reduciría la jornada laboral en el planeta tierra a 29,333333 horas semanales. Un trabajo rotativo y ascendente por el cual todos los integrantes empiezan por trabajos bajos y van rotando y/o ascendiendo en una pirámide por méritos y avance espiritual. Como dijo Platón, en diferentes clases, no sociales, sino de especialización y/o gremios.

Ahora que ya he llegado a un punto complejo de imaginar para la mayoría, sólo decir que es la misma sociedad es quien te abastece de las necesidades básicas intercambiando materia y/o bienes manufacturados a modo de trueque entre diferentes gremios, sin intereses ni especulación, para comprendernos una administración dirigida por filósofos reyes, justos y equitativos y a través de méritos personales accedes a bienes más escasos, siempre cooperando y compitiendo contigo mismo para llegar a tu único objetivo en la vida, superación personal y/o conocer tu verdadero límite o intuir que el único límite que existe es el tiempo, pues no se puede luchar contra él, porque la causalidad es inquebrantable. Para mayor fácil comprensión recomiendo leer a Adam Smith y Karl Marx, su teoría capitalista y comunista para hacer una unión a fin de obtener lo que quiero expresar. Os sorprenderá, para el que no lo haya leído ya, que Adam Smith escribiera un capitalismo diferente al actual.



Hablemos ahora de la educación, el más importante de los temas a tratar y el más olvidado por la sociedad humana. La educación, tanto teórica como práctica ha de ser la principal preocupación de la sociedad. Pues a un sabio le oí decir una vez que en sociedades avanzadas se valora únicamente el conocimiento. Entendemos una educación en muchos senderos, tanto para el trabajo como para la vida cotidiana y/o convivencia. Los valores esenciales han de estar escritos en sangre (respeto, libertad, amor, paz, responsabilidad, disciplina, eficiencia), pulir los 7 pecados capitales (ira, envidia, gula, avaricia, soberbia, lujuria y pereza) y luego variadas especialidades de cada ser (profesores, ingenieros, médicos, recolectores, limpieza, …., sin olvidar la educación en el camino del amor por todo el sistema (recomiendo releer filosofía del individuo nuevamente), el respeto y el despertar del artista interior. En ciclos rotativos para recorrer cuantos más senderos del conocimiento, mejor. Quizá alguno llegue a la unidad nuevamente, y equilibre la dualidad que el cosmos nos dejó como un reto interesante.

Por último cabe hablar aquí del ocio, el verdadero ocio. No el ocio nocturno (vicio) basado en la fuerza más baja y que ha llevado a la humanidad a tropezar, perdí la cuenta el número de piedras, a lo largo de toda la historia. Hablo del deseo, por si alguien aún no ha llegado a esta conclusión. Un ocio sano e integrado con el planeta y sus habitantes. Unos verdaderos hobbies que te hacen sentir feliz y realizado como dijo Freud. Cada uno sabrá a qué me refiero, pues para gustos, colores. Pero a modo de ejemplo servirán: Senderismo, conversaciones interesantes, reuniones sociales temáticas, juegos de mesa/cartas u otros, deportes en equipo, admirar las estrellas, etc…

Para finalizar y a modo de conclusión, sólo decir que este artículo únicamente ha sido un inciso de una poderosa idea que se tiene que madurar en sociedad, un pequeño grano de arena sólido en un desierto de arenas movedizas que intentan hundirte y someterte a la voluntad de un sistema corrupto, arcaico y obsoleto condenado a la muerte pero que ha aprendido a sobrevivir demasiado tiempo ya. Recordad, que un cambio social es factible si los individuos cambian, por semejanza, la sociedad lo hace también.




http://descifrandoeluniverso.es/2012/01/07/descifrando-el-universo-la-sociedad-de-la-abundancia-o-sociedad-utopica-version-0-8-beta/

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