Somos una raza bebé de siete mil millones, separados por diferentes sistemas de creencias de cómo funciona el planeta.
Imagina una raza unida en su saber y no dividida por sus sistemas de creencias. Al mismo tiempo, todos percibimos nuestra realidad física como la misma. Con sólo percibir ‘cómo es el mundo’, estamos simultáneamente creando. Hallazgos recientes en la física cuántica y la ciencia de corriente principal están empezando a comprender que la conciencia y la forma en que percibimos la realidad son
directamente responsables de la creación de nuestra realidad.
La percepción típica es ir a la escuela, conseguir un trabajo, y participar en las actividades diarias, tales como deportes, películas, bebidas y mucho más. Nos despertamos por la mañana y repetimos el mismo ciclo sin observar lo que está ocurriendo en nuestro planeta. Nuestro sistema actual está orientado en hacernos mirar hacia adelante.
Cuando estamos en la escuela estamos estudiando para nuestro futuro, para que podamos tener un trabajo, cuando nos encontramos en nuestro trabajo, estamos trabajando para ahorrar dinero para tener las cosas y tener seguridad. Siempre estamos participando para algo delante de nosotros, que totalmente nos desconecta del momento presente.
Mientras estamos participando en este sistema, estamos tan concentrados en tener éxito y sobrevivir que nunca nos cuestionamos lo que está sucediendo dentro de nosotros y en el planeta Tierra. Nuestras fuentes para la verdad son los principales redes de medios de comunicación. Hemos entregado nuestra conciencia casi hasta el punto en el que dejamos de cuestionar las cosas. Por conciencia me refiero a cómo percibimos nuestra realidad.
Si usted realmente piensa de ello, tomamos a un niño de una edad joven y lo llenamos con nuestra versión de la realidad. En la escuela se nos enseña esencialmente la forma en que funciona y opera el mundo. Se ha hecho evidente que lo que nos enseñan es a menudo lo que nuestros padres nos han enseñado, que también es lo que sus padres les enseñaron.
Mientras pasamos por el sistema, algunos de nosotros despertamos y nos damos cuenta de que el mundo no es lo que aparenta y no es como se nos enseña que es. Nos damos cuenta de que hay una historia totalmente independiente para el planeta Tierra.
Si nuestra conciencia crea la realidad, y nuestra percepción de la realidad se encarga de dar forma a nuestra realidad, entonces la nueva información y la transparencia en nuestro planeta tiene el potencial de cambiar la forma en que nosotros percibimos.
Los OVNIs por ejemplo, entre otros temas relacionados, presentan evidencias de que no estamos solos en el planeta.
La energía es otro ejemplo, cada vez es más evidente que tenemos acceso a la energía de punto cero o energía libre. Podría enumerar una serie de ejemplos, pero el punto es que vivimos en un mundo que se caracteriza por una civilización que es independiente en su conocimiento sobre la verdadera naturaleza de la realidad. Lo que quiero decir es que tenemos una estructura en el planeta que se desarrolla fuera de la ocultación de información. Esta estructura ha tomado el control de los descubrimientos científicos y tecnológicos y los ha suprimido.
Mantener ocultos de nosotros los elementos conocidos de nuestra realidad, es una forma de control de la población y de manipulación de la percepción. Al mismo tiempo, no se puede ocultar la verdad, y la verdad conduce a la libertad.
Básicamente, todos somos uno, y tenemos que empezar a ver a todos como una faceta más de nosotros mismos. Muchos de nosotros hemos sido programados para creer que es un mundo donde 2+2= lo que te digan. Constantemente tomamos en las emociones de ira, el estrés, el malestar y tristeza que resultan de estar en un ambiente que no es propicio para nuestro estado natural, pero más como resultado de no estar en paz con nosotros mismos. Nuestro estado natural es el amor, la cooperación, la relajación y la paz.
Una experiencia de ser humano en el planeta Tierra podría alejarnos de nuestro estado natural, pero en verdad somos nosotros mismos quienes nos ponemos fuera de nuestro estado natural. Literalmente, científicamente tenemos la capacidad de manifestar cualquier tipo de realidad que deseamos, dado el tipo de energía que todos emanamos.
Todo está hecho de potencialidad infinita, y el momento en el que la conciencia decide crear a partir de esto, la creación tiene lugar. Los descubrimientos del físico Thomas Young en su famoso experimento de la doble rendija (vídeo abajo) ayuda a mostrar esto, y al hacerlo arrojar luz sobre el campo cuántico y de cómo toda nuestra realidad funciona.
Este vídeo es un gran ejemplo del Principio de incertidumbre teorizada por Werner Heisenberg: no se puede determinar con certeza absoluta ciertos pares de variables físicas como la posición y el momento lineal, cuanto más precisión queramos obtener en el valor de una de las variables más imprecisos deberemos ser en el cálculo de su par conforme a una inecuación fijada …Expresado de otra manera el principio revelaba que el propio proceso de observación influía en lo observado y que ambos procesos eran intrínsecamente inseparables, visto de otra forma la Realidad es incierta cuando no la observamos, pero al momento de medir obtenemos un único valor definido …Pero este comportamiento lo denominamos: “Principio de Superposición” que explica este comportamiento contradictorio
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