A través de la historia se nos han entregado tres números que han sido de gran importancia dentro de las matemáticas y que curiosamente están representados con una letra.
- El primero es el que representa la longitud de la circunferencia y es el 3,141… (pi) π
- El número e= 2´718…(inicial de su descubridor, Euler). Ecuación que nos permite dibujar o crear una curva sin reservas.
- Y finalmente el número de oro, (Fi) representado con la letra griega φ , una diferencia importante entre los dos primeros y el número de oro, es que los primeros no son una solución de ninguna ecuación polinómica, mientras que el Nº de oro, sí lo es.
Hace un tiempo hice un curso de geometría sagrada (se llama sagrada porque no está manipulada por el hombre, por lo tanto, no tiene nada de esotérico su nombre, si no lógico) donde nos enseñaron como éste número o secuencia, está inserta en cada
cosa de la naturaleza así como en el universo (como es arriba, es abajo), me pareció tan interesante, además que no dejo de sorprenderme cuando camino por mis bosques y me encuentro como esa secuencia se presenta en cada árbol, algunos moluscos e imágenes que se presentan ante mí, que no me queda más alternativa que compartir con ustedes de manera básica, este interesante tema.
Comparto ahora un interesante, simple y claro artículo que lo explica por sí mismo.
“Muchos de nosotros conocemos la secuencia de Fibonacci por experiencia propia, por que nos lo contaron, o por haber visto la película del Código DaVinci (2006). Pero para aquellos que no la conocen todavía, les recuerdo de que trata: se trata de una progresión numérica en la cual el siguiente número es el resultado de la suma de los dos anteriores (1,1,2,3,5,8,13, etc.)
Ahora bien, esta secuencia, que al parecer no tiene mucha significancia, posee muchas propiedades interesantes que la hacen un elemento de estudio bastante cultivado, sobretodo por las propiedades matemáticas que presenta. Pero una de los aspectos más relevantes de esta secuencia es que se presenta en nuestro mundo natural, muy a menudo y probablemente sin que nos demos cuenta. Veamos algunos ejemplos:
…y que curiosamente se asemeja al caparazón (shell) del Nautilus, un cefalópodo que vive en las profundidades del océano
A continuación, Galaxia en espiral. Los brazos de estrellas logran aproximarse a la espiral Fibonacci a pesar de tener longitudes colosales. (Créditos a TopTechWriter.US)
Ahora bien, cuando hablamos de la serie de Fibonacci, no podemos ignorar otra curiosidad que nace a partir de esta secuencia: la llamada “Razón Áurea”, o lo que es lo mismo: 1.6180339887. Este número resulta de la división de un número de la secuencia sobre el inmediato inferior, y que tiende a ser constante cuando las cantidades tienden al infinito. Esta razón ha generado mucho interés en los matemáticos y científicos por mucho tiempo, ya que se presenta en muchas formas y no sólo en el campo de las matemáticas, sino de la ingeniería, estética, música y por supuesto en la naturaleza también.
Artículo tomado de: http://www.curiosaweb.com/2009/05/la-secuencia-de-fibonacci-en-la-naturaleza/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario