La ruptura de la delicada armonía entre ellos en el cuerpo humano, provoca alteraciones en nuestro bienestar, especialmente sí abusamos de la energía de estos elementos o la obstruimos.
Cada día nos calentamos con Fuego,
Nos bañamos con Agua,
Respiramos gracias al Aire.
Caminamos sobre la Tierra.
Ser consciente de ellos y su estado en nosotros nos puede llevar a un profundo conocimiento de la VIDA
Todos los elementos son tremendamente poderosos. Somos poco conscientes del gran poder que sustentan. Poseen como las monedas dos caras o condiciones: positivo, construyendo, o en sentido negativo, destruyendo y disolviendo.
LA TIERRA:
El elemento tierra representa la materia sólida. La tierra, al igual que el útero en el periodo de gestación, nutre, da forma y transforma la materia para que pueda expresar la vida de aquello que es.
Estamos perdiéndonos los poderes de la Madre Tierra, la cual es considerada la Madre por todas las culturas. La Madre Tierra nos siente, su contacto es importante para la salud.
La tierra, el más físico de los cuatro elementos. Es el terreno sobre el que pisamos, la prosperidad, el cultivo, la cosecha, la estabilidad y el sustento. La Tierra es nuestro hogar, nos da estabilidad para caminar por la vida, la parte de nuestra vida donde el crecimiento empieza y finaliza.
Este elemento mantiene un estrecho vínculo con nuestro cuerpo físico y todas nuestras sensaciones
ARMONIZAR EL ELEMENTO TIERRA
- Caminar descalzo sobre la tierra, nos nutre y nos recarga de energía, también podemos descargarla, caminando sobre hierba cuando tenemos una energía densa que nos pesa.
- Manualidades con barro como forma de expresión y creación.
- Trabajar la tierra; sembrando, plantando, cuidando, nos hace ser consciente que para conseguir aquello que queremos tenemos que atenderlo y mimarlo día a día.
- Caminar por el campo, observando la naturaleza en todo su esplendor: Animales, colores, plantas y toda la sabiduría y belleza que poseen.
EL AGUA:
El agua es el elemento de todo lo emocional, la intuición, las artes, la magia.
Se trata del elemento líquido que disuelve, limpia, mezcla, comunica. El agua va asociada a la feminidad y la receptividad, es matriz y origen de toda vida. Durante el bautismo la usamos como símbolo de "Purificación".
El agua es fluidez, el saber adaptarse al recipiente que la contiene. En el ser humano saber estar bien en todas partes, como hacen todos los líquidos. Conocer y controlar el elemento agua significa aprender a aceptar y controlar los poderosos cambios internos y emocionales. Ésta es, sin duda, la más importante lección que el elemento agua nos puede transmitir, así como aprender a aceptar, respetar y valorar la vida en todas sus formas, sin excepciones.
Si permitimos el movimiento fluido del agua en nuestro organismo, será nuestra protectora. Somos agua en 80% aproximadamente, así que es también es nuestro principal alimento.
El agua, el más adaptable de los cuatro elementos, dignifica a la materia en estado líquido, y simboliza en la naturaleza el reino de todo lo emocional, la intuición, el subconsciente, el mundo interior.
ARMONIZAR EL ELEMENTO EL AGUA
- Beber abundante agua a lo largo del día, 2-3 litros, aumenta la hidratación de nuestras células y también su regeneración.
- Antes de la ducha, frotarse con un trapo áspero para eliminar las células muertas esto activa la circulación periférica y permite que la piel se hidrate y respire mejor.
- Lavarse la cara con abundante agua antes de acostarse para dejar atrás todas las impurezas del día incluso las emocionales.
- Escuchar y si podemos al mismo tiempo observar el movimiento del agua en el rio, el mar o una cascada nos aporta tranquilidad y equilibrio.
- Caminar por la playa, nadar en un límpido remanso, sintiendo que el agua lava, arrastra y deja ir las emociones que te bloquean
EL FUEGO:
Es la energía que transforma lo solido en líquido y lo líquido en gaseoso. El fuego es luz, calor, está representado por el Sol y se identifica como Padre Creador.
Es el elemento de transmutación. El Sol tiene poder, y nosotros podemos alinearnos con él y conseguir la libertad.
El fuego es rojo. Es el calor que fecunda la Tierra para que dé frutos. El corazón de la tierra es fuego, pero tiene el poder para abrirse paso a través de la corteza. Al igual que nuestro espíritu que se abre camino a través de nuestro cuerpo.
ARMONIZAR EL ELEMENTO FUEGO
- Mirar al Sol 10 segundos cuando nace o cuando se está escondiendo. Aumentar 10 segundos cada día. Con esta práctica cogemos los fotones del Sol, los cuales constituyen una energía muy poderosa para nuestra salud y libertad.
- Tomar el Sol unos minutos desnudos siempre que podamos. La informaciónde la luz solar y el prana son un alimento para nuestras células.
- Caminar hacia el Sol, sintiendo su radiación en el cuerpo, el calor que nos aporta, la sensación de calidez, de hogar.
- Sentarse cerca del Fuego observando cómo sus llamas danzan, se elevan y expanden con total libertad, tratando de sentir esa libertad.
EL AIRE
Es el elemento de la ligereza, flexibilidad, movilidad, liberación, vuelo, equilibrio, difusión. Nos libra de trabas, de opresiones, se trata del fin de las rutinas, nos da el aliento de la aventura.
También es la anarquía de las tempestades, es asimismo la "Gran Renovación"
Nuestra vida se establece a partir del hecho respiratorio
Esotéricamente hablando y conforme a sus características, el elemento tierra da estabilidad a los otros tres y les sirve de base, ya que poseen una naturaleza menos estable.
El Aire es movimiento, contacto, comunicación, es nuestro pensamiento y sentimiento en palabras.
Como elemento, es casi totalmente incontenible pues no podemos verlo. No es sólido como la Tierra, o ardiente como el Fuego, o fluido como el Agua. Si tratamos de cogerlo, obtenemos un manojo de nada, lo mismo que si tratamos de coger un pensamiento, que se resbala de nuestras manos.
ARMONIZAR EL ELEMENTO AIRE
- Todos los días dediquemos unos minutos a la respiración consciente. Con cada inspiración tomamos la vida y en la expiración la dejamos ir, es como muerte y resurrección, en un proceso constante, sin aférranos a nada, confiando en que la Vida se renueva constantemente.
- Pasear en un entorno de arboles. Poner atención al sonido que produce el aire con los arboles, al sonido de los pájaros, la caricia del viento en nuestra piel y cabellos. Es fresco y calmante. Respira profundamente, y date cuenta de la paz que se puede lograr al permitir que tus pensamientos fluyan libres
- Podemos ponerle color a la respiración, imaginar que el aire es de un color y ese color nutre y da sus propiedades a nuestro organismo.
Azul-Tranquilidad
Oro- Fortalece el cuerpo y el espíritu
Lavanda-Ayuda a la curación espiritual
Blanco- Para purificar
Rojo- Energía y vitalidad
Autor: Dolores Picallo Kinesiologia Holistica
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