(Photo by Sean Gallup/Getty Images)
Así lo destaca el secretario general de la OMM, Michel Jarraud en el informe 'Declaración de la OMM sobre el estado del clima mundial en 2014' publicado por la organización.
En el documento, Jarraud asegura que "cada vez resulta más contundente que el calentamiento de la Tierra está provocado por la actividad humana" y señala que el océano tiene una "importancia decisiva" en el cambio climático ya que absorbe más del 93 por ciento del calor atrapado por los gases de efecto invernadero.
En concreto, la Declaración confirma que las temperaturas medias mundiales de la superficie del mar en 2014 han sido las más altas de todos los años de los que se tiene registro.
El informe expone los fenómenos extremos más significativos que se produjeron en 2014, entre los que ha destacado que en Europa "se dio un calor inusual" y 19 países del continente --entre los que no se encuentra España-- informaron de que habían registrado una temperatura anual sin precedentes.
Entre los fenómenos meteorológicos más destacados en todo el mundo en el reciente ejercicio señala que se produjeron "graves" inundaciones y "crecidas repentinas" en numerosos países y, especialmente, en los Balcanes en mayo y junio (afectaron a Bosnia y Herzegovina, Croacia y Serbia), Asia Meridional, África, América Central y del Sur.
En cuanto al mar entorno a la Antártida, ha explicado que algunas partes de los glaciares terrestres de la Antártida se están fundiendo, sin embargo, la extensión del hielo marino aumentó, hasta alcanzar una superficie sin precedentes por tercer año consecutivo.
En concreto, la temperatura media mundial en la superficie superó en 0,09 grados centígrados la media de 14 grados centígrados correspondiente al periodo 1961-1990 y estuvo una media de 0,08 grados centígrados por encima de la anomalía media de 0,50 grados centígrados de los últimos diez años (2005-2014).
"La superficie media de 2014 fue superior a la media a largo plazo en la mayoría de las superficies terrestres" y la cuarta más alta desde que se tienen registros. Por zonas, el informe expone que las áreas de calor más acusado han sido el oeste de América del Norte, incluido Alaska, el oeste de Eurasia, el este de Eurasia, gran parte de África, vastas zonas de América del sur y del sur y oeste de Australia. Sin embargo, en extensas zonas de Estados unidos y Canadá se dieron temperaturas "considerablemente inferiores" a la media anual.
INUSUALMENTE ALTAS O BAJAS
En cuanto a la lluvia, la nieve y el hielo, la precipitación media mundial se acercó a la media a largo plazo. Tuvieron precipitaciones "inusualmente bajas" el suroeste de Estados Unidos, el noreste de China y el este de Brasil, que padecieron sequía en 2014. Por el contrario, tuvieron precipitaciones anuales elevadas en la cuenca del río Paraná y los Balcanes.
La fusión de la superficie del manto de hielo en Groenlandia fue superior a la media del periodo 1981-2010 en junio, julio y agosto. La anomalía estuvo por encima de la media a largo plazo, pero muy por debajo del récord de fusión que se observó en 2012. Según la OMM, el verano de 2014 fue "el más cálido que se haya constatado" en Kangerlussuaq, al oeste de Groenlandia, que es la zona con mayor superficie fundida. Por su parte, en Nuuk se dio el segundo verano más caluroso desde 1784.
Además, el documento anual de la OMM explica que en Europa las temperaturas de 2014 fueron muy superiores a la media y varios países registraron valores anuales "récord o casi récord". En concreto, la anomalía media de temperatura en toda Europa fue significativamente superior a la de todos los años previos, según consta en los registros y fue "el año más caluroso" en 19 países.
El documento refleja que las precipitaciones anuales fueron superiores a la media en Reino unido, oeste de Francia, el oeste de la Península Ibérica --en Portugal el año con más precipitaciones en 25 años--, Italia y "muy especialmente en los Balcanes". Por el contrario, Noruega, el este de España y Francia tuvieron "un tiempo más seco que la media".
MENOS TORMENTAS TROPICALES
En todo el mundo se registraron un total de 78 tormentas tropicales, una cifra inferior a las 94 tormentas de 2013 y a la media de 89 tormentas en el periodo 1981-2010. De estas, 2 se convirtieron en huracanes y 2 en huracanes de gran intensidad (vientos de más de 177 kilómetros por hora).
Entre los eventos meteorológicos más significativos de 2014, la OMM recuerda también las intensas lluvias, que provocaron inundaciones en Bangladesh, Pakistán e India en agosto y septiembre y en Sri Lanka en diciembre.
Las inundaciones afectaron también a países como Marruecos, Mozambique, Sudáfrica, Kenia, Etiopía, Somalia y Tanzania, al tiempo que provocó el desbordamiento de la cuenca del río Paraná en paraguay, Argentina, Bolivia y Brasil. Por el contrario una "grave" sequía afectó a la zona oriental y central de Brasil, Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua.
El documento de la OMM añade también que las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera alcanzaron unos niveles máximos sin precedentes desde 2013 y que el nivel medio global del mar y el contenido calorífico de los océanos llegaron a niveles sin precedentes o estuvieron cerca de batir nuevos récords.
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